La verdad que no elegimos el mejor domingo para ir a Maschwitz… pero no estamos lejos y hacía rato quería ir de día. Así que fuimos igual y fue un show de texturas que valió la pena, incluso con chaparrones!
Habíamos ido a comer con amigos a la noche, hacía tiempo. Una noche divina, de verano… y la verdad, apenas estacionás el auto te sentís en algún lugar de la costa. Hay una onda muy relajada, la gente caminando por la calle, muchos árboles añosos… y cantidad de lugarcitos para comer algo.
Las primeras cuadras de la calle Mendoza se convirtieron en un nuevo polo gastronómico, y seguramente hay muchas opciones que valgan la pena. Pero indudablemente la estrella es el Mercado de Maschwitz, con una arquitectura y ambientación «conventillo chic» que me encantó cuando lo vi la primera vez, y me sigue encantando!
A pesar de la lluvia, llevé la cámara y no me pude resistir a hacer varias fotos del Mercado, sobre todo de sus texturas y colores y acabados… placer para los sentidos!
Para las que nos gusta el reciclado, darle nueva vida a lo antiguo y el look vintage, este lugar es super inspirador. Recomiendo darse una vuelta, con sol o lluvia, no importa! Lo van a disfrutar muchísimo!!
Además, hacia el lado del pueblo, hay otro lugar de deco que quería conocer: Die Ecke. Lamentablemente estaba cerrado, espero verlo la próxima porque ya desde afuera vale la pena. Miren sino:
Maschwitz es un buen programa para ir por primera vez, y para volver siempre!
Aprovecho a desearles un MUY FELIZ DIA para mañana! A todos los que con mucho amor, ganas y TRABAJO, desde su profesión y/o emprendimiento, hacen que este mundo sea un lugar más feliz.
Yo sigo de vacaciones… un derecho de todo trabajador 🙂
Que lo pasen lindo!
Más info:
https://www.facebook.com/pages/Mercado-de-Maschwitz/198832953463126
* En esta nota de Vero Mariani para Revista Living hay mucha info del Mercado de Maschwitz, del Paseo Mendoza y otros imperdibles en una visita a esta localidad.
* Esta vez comimos muy rico en La Anita. Para una comida algo más formal, Ley Primera es una parrilla buenísima y re linda decorada. Los mismos dueños abrieron en diagonal un restaurant de pastas que prometía para el día lluvioso también! y me quedé con ganas de un café en Lulú.
* Todas las fotos son mías, con un efecto «atenuado»… la edición que me gustó para estas fotos 🙂
